ARGENTINA: Anabel Moro, con muchas chances de subir al podio

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lacapital.com.ar – Anabel Moro no puede menos que tener sueños dorados. En un año en el que se sorprendió a sí misma por el gran rendimiento, la nadadora disminuida visual que en julio hizo historia en su deporte al romper una marca parapanamericana que estaba intacta desde hacía 23 años, llegó a los Juegos Parapanamericanos de Guadalajara (para deportistas con capacidades especiales), que comenzarán el viernes, con las expectativas intactas. No puede menos que tener sueños dorados Anabel luego de haberse reposicionado con creces en el ranking mundial y de ser hoy, con 32 años, la mejor nadadora de América.

A mitad de año, Anabel participó del Challenger Mundial de Natación en Montreal, donde llegó por invitación y en el cual participaron nadadores especiales y convencionales, entre ellos el estadounidense Michael Phelps. Su objetivo era decir presente para mejorar marcas, algo que le venía costando. No sólo lo logró sino que al llegar a Rosario se enteró de que había superado el récord que la norteamericana Trischa Zorn ostentaba desde los Juegos Paralímpicos de Seúl 1988, en 100 metros pecho. Desde ahí se construyen las ilusiones de Anabel en Guadalajara: «En realidad ese torneo ni siquiera es nuestro porque llegué por invitación. Igual fue un gran incentivo para estos Parapanamericanos. Voy a reafirmar todo lo bueno. Las marcas están hechas y por eso pienso que hay muchas chances de traer una medalla», le dijo a Ovación.

La nadadora oriunda de Salto Grande pero que hace casi una década representa a la Asociación Rosarina de Deportes para Ciegos y disminuidos visuales competirá en 50 y 100 metros libre y 100 pecho, su especialidad, con la que consiguió posicionarse como la mejor del continente y está sexta en el ranking mundial a partir de romper el récord de 1m26s30 con su tiempo de 1m25s06 conseguido en julio.

Los números pueden ser un arma de doble filo. Por un lado para Anabel podrían resultar una presión para subirse al podio, pero también les da la tranquilidad en la que descansan los logros conseguidos. Es que en Toronto, además de instalar su nombre en la historia, consiguió las marcas mínimas para llegar a Juegos Paralímpicos de Londres 2012, exigencia que sí tendrán varias de sus rivales. En México afrontará sus segundos Parapanamericanos y Londres serán sus terceros Paralímpicos. Con esa experiencia Anabel tiene más que ganar que perder. Esa tranquilidad lejos de ser un factor de relajación, lo es de exigencia: «De mitad de año para acá me vengo preparando muy bien, endurecí el trabajo, agregué más calidad al entrenamiento y eso me hace llegar muy bien», contó la nadadora. Su entrenadora nacional Marion Laub y los rosarinos Liliana Haseinbein y Alberto Tarsitano (De Rosario Central y Náutico Avellaneda, respectivamente, clubes que le ceden las instalaciones) tienen que ver en este rendimiento.

En la estación que será Guadalajara, Anabel no admite grises. Sólo revalidación y medallas.

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