diariopopular.com.ar – Los Juegos Paralímpicos Londres 2012 contarán con presencia lomense. Y uno de los atletas de la región que competirá en poco más de dos meses es José Luis Santero, quien será el representante argentino en la categoría T11/12 para la maratón de 42 kilómetros, que se realizará el 9 de septiembre.Con 36 años, este lomense llegará a la competencia con más de diez maratones dentro de nuestro país y un exigente entrenamiento que alterna entre el Cenard, el parque municipal de Lomas de Zamora y la ciudad salteña de Cachi.
Desde chico, Santero padecía miopia y astigmatismo y a los 28 años le diagnosticaron retinosis pigmentaria, que «hoy por hoy no tiene solución», aclaró. «Tengo 5 grados de un ojo y 4 del otro en el campo visual. Hacia adelante puedo ver hasta 30, 40 metros pero sin nitidez. Corro con guía, que me indica los giros, lomos de burros, pozos, empedrado. Tiene que estar un paso atrás durante la competencia», detalló el deportista en diálogo con El Suburbano.
«De chico jugaba al fútbol, hice rugby. Pero a correr empecé a los 31. Pesaba 100 kilos y fumaba dos atados de cigarrillos por día. Fui al médico y empecé a hacer cinta, caminata. A los dos meses empecé a trotar y a los seis meses estaba corriendo, siempre en cinta», contó Santero.
Además, el deportista de Lomas detalló cómo fue su camino hacia Londres: «En 2010 hice mi mejor maratón, pero no estaba categorizado internacionalmente, en un torneo oficial de IPC. Me llevan a competir a San Pablo para tener la categoría internacional. Hice medalla de oro en 1.500 y plata en 5.000. Ahí me dieron la categoría y eso me habilitaba para que todas mis marcas las suban al ranking. Mi mejor 10.000 fue 33m23s. Ahí me dijeron que con ese nivel iba a ir a los panaparamericanos de Guadalajara 2011, donde quedé quinto en 5.000 y séptimo en 1.500».
Sobre sus inicios, el atleta lomense agregó: «Empecé a correr en las fiestas mayas como convencional, sin saber que había una categoría para los que no ven bien. Hice 43 minutos más o menos para los 10 kilómetros. Corrí varias carreras de calle siempre entrenando en cinta. Cuando comencé no me imaginé todo lo que estoy viviendo ahora», indicó Santero.
Sin embargo, a pesar de este arranque prometedor del atleta lomense, rápidamente surgieron problemas: «En 2009 me categorizaron porque me había perdido en un par de carreras. Ahí empezó a existir el problema de que salvo en maratón no había categoría para disminuidos visuales, era en no vidente y me surgía el problema de que cuando subia a un podio no la pasaba bien porque le tenía que explicar a la gente que era disminuido visual. No me sentía bien», expresó.
Pero la lucha del atleta de la región tuvo su fruto y encontró el lugar donde participar: «A medida que pasaron los meses me enteré que existía un parapanamericano, un paraolímpico. Yo venía entrenando todos los días, mejorando, y cada vez me motivaba más. Cuando me entero de estos torneos encontré donde podía participar y así empezó este camino».
