Rafael Muiño renuncia a la selección española

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Muiño, que el sábado ganó su sexta liga con el Fundosa ONCE, comunicó esta decisión al seleccionador español, Óscar Trigo, durante la semana pasada.

Rafael Muiño, jugador del CD Fundosa ONCE
Rafael Muiño, jugador del CD Fundosa ONCE

Fundosa ONCE. La selección española masculina de baloncesto en silla de ruedas no podrá contar en el Campeonato de Europa, que se disputará en Francfort (Alemania) del 28 de junio al 7 de julio y clasificatorio para el Mundial del próximo año, con uno de los mejores bases del mundo. Rafael Muiño, jugador del Fundosa ONCE, ha decidido renunciar a vestir la camiseta nacional por motivos personales. 

Precisamente, el base tinerfeño formaba parte de la preselección nacional de 20 jugadores que inician desde hoy domingo la primera concentración del año, en el Centro de Alto Rendimiento de Madrid – Residencia Blume, con vistas a preparar el Europeo de Francfort.

De esta forma, Muiño no podrá estar con el resto de sus compañeros en esta concentración, que se prolongará hasta el próximo 29 de marzo.

Muiño ha vestido la camiseta de la selección nacional cerca de 70 ocasiones. Se estrenó en el Campeonato de Europa jugado en Roermond (Holanda) en 1999, donde España fue décima y descendió de categoría. Además, estuvo en el Europeo B disputado en Valladolid, en 2000, donde el combinado español logró la medalla de oro y el ascenso.

También ha competido en otros cinco campeonatos de Europa (Sassari y Porto Torres 2003, París 2005, Wetzlar 2007, Adana 20009 y Nazaret 2011). Obtuvo su éxito más brillante en septiembre de 2011, con la medalla de bronce del Europeo celebrado en tierras israelíes y que supuso la histórica clasificación de España para los Juegos Paralímpicos de Londres 2012, después de 16 años de sequía paralímpica.

Sobre su determinación, Muiño cuenta los motivos: “Es, sobre todo, por tener más tiempo con mi hijo y con mi familia. Son ya muchos años en la selección, desde 1999. El año pasado fue muy duro, con casi 80 días de concentración y le quité mucho tiempo a mi familia. La verdad es que este año necesito desconectar. Además, el equipo me exige mucho y llevo mucho tiempo sin parar”, apunta.

Muiño aclara que su decisión de renunciar a la selección española no es definitiva. “Tengo 37 años y todavía me veo fuerte y capaz de seguir jugando a un buen nivel, tanto en la selección como en el club, pero este año quiero tomármelo sabático y no es algo definitivo, sino temporal”, apostilla.

De su periplo con el equipo nacional, Muiño no duda respecto de cuál fue su mejor experiencia: los Juegos Paralímpicos de Londres 2012, donde España obtuvo una brillante quinta posición. “Me quedo con todos los momentos de los Juegos: desde que entramos en la Villa Paralímpica, los momentos vividos con los compañeros, todos los partidos, el público, esos pabellones a reventar de gente… Todo deportista debería pasar por algo así porque es algo inolvidable que te marca de por vida”, señala.

En el otro lado de la balanza, indica que “lo peor era la falta de trabajo y de medios que había antiguamente en la selección, aquello de juntarnos dos días e ir a jugar. Pero sí íbamos con una ilusión tremenda y lo dábamos absolutamente todo. De hecho, casi sin preparación estuvimos muchas veces en campeonatos de Europa a punto de clasificarnos para mundiales y Juegos Paralímpicos. Cuando había cinco plazas quedábamos sextos, y cosas así”.

“EL BALONCESTO EN SILLA DE RUEDAS HA EVOLUCIONADO MUCHÍSIMO”

Para Muiño, vestir la elástica española en el próximo Campeonato de Europa es “lo más bonito que le puede pasar a un jugador. Representar a tu país, con los mejores jugadores del ‘Viejo Continente’ es lo mejor que le puede pasar a un jugador y para las nuevas generaciones tiene que ser lo máximo. Pero después de tantos años estoy un poco cansado”.

Recuerda con agrado su primera participación con España, en el Europeo celebrado en Roermond (Holanda) en 1999: “Tenía 21 añitos y llevaba poco tiempo jugando. Tuve la suerte de estar con grandísimos jugadores como Diego de Paz, Manolo Rodríguez y Antonio Henares. Me sentí una persona muy afortunada de ir a un campeonato así. También disfruté de cada momento y tengo un recuerdo increíble”.

El base canario destaca que el baloncesto en silla de ruedas “ha evolucionado muchísimo” desde que él debutara con la selección española. “De hecho, en aquel entonces España era una potencia, cuando no había mucho dinero para concentraciones y material. Ahora es todo lo contrario. Hay selecciones que se están concentrando durante todo el año, selecciones B, escuelas, seguimientos… Y en selecciones como Gran Bretaña todos los jugadores cobran por ir. Se ha dado un paso totalmente diferente de juntarte una semana antes y jugar. Ahora no, hay selecciones que están concentrándose todo el año”, afirma.

En cualquier caso, Muiño destaca que tiene “una espinita clavada”, y es ganar la Champions Cup con el Fundosa ONCE. “Igual que hace un año lo que más deseaba era ir a unos Juegos Paralímpicos y hacerlo lo mejor posible, a día de hoy quiero ser campeón de Europa con mi club, que me lo ha dado todo”, concluye.

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