Entrevista exclusiva al jugador de la Selección Española de Goalball, Román Martínez
El deportista aragonés afirma que esta medalla será recordada en los próximos años
José Ángel Pérez / dxtadaptado.com
El jugador de goalball Román Martínez es el segundo integrante de la selección masculina con el que hablamos en exclusiva en dxtadaptado.com, tras la entrevista realizada ayer al sevillano Javier Serrato.
Román Martínez nos explica que hay varios comienzos en su etapa como integrante en la selección española, como el primer amistoso que jugó en Madrid contra la selección española “A” o el partido contra Canadá en el Mundial de Sheffield.
En la entrevista, que puedes leer en exclusiva a continuación, Román nos comenta que hace unos años no se imaginaba en el podio de un Europeo y que esta medalla será recordada en los próximos años, como ya lo son los subcampeonatos conseguidos en 2005 y 2007.
También el deportista aragonés nos dice que la decepción por perder la final le duró dos minutos, porque sabe que han luchado por el Campeonato hasta el final, pero está un poco dolido por haber encajado por su palo el único gol del encuentro.
Por último, nos confiesa que esta temporada la recordará siempre porque no solo ha conseguido éxitos con la selección, sino también con su club.
A continuación, la entrevista al jugador Román Martínez:
1) ¿Por qué comenzó a jugar a jugar al goalball?
Fue aproximadamente con 20 años, coincidiendo con una severa pérdida de visión. Hasta ese momento me había dedicado al atletismo llegando a participar en un campeonato de Europa juvenil, pero la pérdida de visión me iba a suponer tener que cambiar mis hábitos a la hora de entrenar y competir ya que, a partir de ese momento, iba a necesitar la ayuda de un guía. Además, algunos de mis mejores amigos de la ONCE ya entrenaban a goalball y me animaron a probar.
2) ¿Qué sintió cuando jugó el primer partido con la selección?
La verdad es que podría hablar de varios primeros partidos con la selección:
En 2006 tuve la oportunidad de participar en el, desde entonces tradicional, campeonato internacional de Madrid. Lo hice junto a, entre otros, Jesús Santana y Javier Serrato (compañeros en la actual selección) formando parte de una selección española B de jugadores jóvenes. Recuerdo que el primer partido fue contra la selección Española absoluta; por entonces yo no había jugado todavía en primera división por lo que nunca había recibido un lanzamiento con la fuerza con la que lo hacían esos jugadores. No recuerdo nervios, sólo ilusión por enfrentarme a equipos de un nivel tan alto, por saber cómo iba a reaccionar ante tales lanzamientos. Si no recuerdo mal, el partido contra España A lo perdimos 11 a 1 terminando en la primera parte (en este deporte, si un equipo alcanza 10 goles de diferencia, el partido se da por finalizado), contra Alemania 13 a 3… Sin embargo fuimos capaces de ganar el último partido, contra la selección de Portugal, por 5 a 3 y recuerdo sentir una alegría que no volví a sentir jugando a goalball hasta mucho tiempo después.
Por su parte, en 2010 fue mi estreno con la selección absoluta. Fue en Ízola (Eslovenia) en un campeonato internacional amistoso preparatorio del Mundial de Sheffield de ese mismo año. En ese momento todavía no se había dado la lista de los jugadores que acudirían a dicho Mundial, por lo que yo tenía que demostrar que podía estar entre ellos. Creo que el primer partido de ese campeonato fue contra Canadá; lo que sí recuerdo es que salí al principio de la segunda parte. En esa ocasión sí había nervios; recuerdo que no me importaba mucho el resultado, que sólo pensaba en hacerlo yo bien.
Y, finalmente, mi estreno en un campeonato oficial con la Selección española fue en el mencionado Campeonato del Mundo de Sheffield en 2010. Recuerdo que fue contra Australia, que terminamos ganando 8 a 3 y que yo jugué los últimos 5 minutos o así. Sí recuerdo nervios, pero en esta ocasión ya no pensaba tanto en mi actuación individual sino que, sobretodo, deseaba que el equipo ganase el partido. Por suerte, en ese campeonato terminé jugando muchos minutos.
3) Hace unos años, ¿si le hubieran dicho que iba a disputar la final de un Europeo se lo creería?
Claro que no. Los objetivos van surgiendo poco a poco. Al empezar a entrenar mi objetivo era aprender lo más rápido posible para poder competir. Una vez conseguido el objetivo de jugar un partido oficial, el siguiente fue ser titular con mi equipo en tercera división. Posteriormente mi objetivo era poder jugar en el primer equipo de mi ciudad y, una vez logrado, ser titular en el mismo. A continuación llegó la posibilidad de formar parte de la selección española y mi sueño era poder acudir a algún campeonato oficial. Una vez conseguido esto, había que lograr afianzarse entre los seleccionados. Y, finalmente, una vez que parece que el grupo es más o menos estable, ha llegado el sueño colectivo, que no es otro que estar en la élite del goalball mundial y, juntos, participar en las paralimpiadas de Río de Janeiro. Seguro que si, finalmente, conseguimos llegar a dichas paralimpiadas, el sueño pasará a ser el conseguir la medalla de oro en dicho campeonato. Así de egoísta es el deportista, pero eso es lo que te empuja a entrenar día a día: conseguir el sueño que todavía no has alcanzado.´
4) ¿Qué es lo primero que se le pasa por la cabeza al pensar que se han proclamado subcampeones de Europa?
La verdad es que son muchos los pensamientos que te surgen:
Por un lado, piensas que eso ya no te lo quita nadie. Que del mismo modo que nosotros recordamos a los que fueron medalla de bronce en las paralimpiadas de Atlanta o a los que, al igual que nosotros, se proclamaron subcampeones de Europa en 2005 y 2007, en el futuro, cuando nosotros nos retiremos y vengan otras generaciones, recordarán esta medalla y este equipo.
Por otro lado piensas que el sueño acaba de comenzar. Que porqué no conseguir dentro de 8 meses una medalla en el Campeonato del Mundo de Finlandia y, con ello, lograr la clasificación para las paralimpiadas de Río. Y que porqué no conseguir traer una medalla de dichas paralimpiadas.
Y una vez que sueñas con ese futuro, recuerdas el trabajo que ha supuesto llegar hasta este subcampeonato y piensas en todo lo que queda por trabajar para estar en disposición de luchar por dichos sueños. Es cierto que con una medalla en el pecho todo cuesta un poco menos o, al menos, sabes que vas por el buen camino, que el trabajo está dando sus frutos.
5) ¿No se siente un poco decepcionado por no lograr el oro tras tenerlo tan cerca?
La verdad es que la decepción duró dos minutos. Este equipo venía de varias decepciones en los campeonatos oficiales anteriores. Lo habíamos hecho bastante bien en los campeonatos amistosos de los últimos dos años, pero era necesario refrendarlo en un campeonato oficial. Una nueva decepción unida a las anteriores quizá hubiera sido un palo demasiado grande para la moral de este grupo. Por lo tanto, para nosotros, alcanzar una medalla ya era un éxito; suponía demostrarnos a nosotros mismos que tenemos el nivel de los mejores, y no sólo en campeonatos amistosos, sino también en el momento de la verdad.
Sin embargo, pensando únicamente en el partido de la final, sí he de decirte que me dejó un sabor algo amargo. Partiendo de la base de que en el goalball suele haber bastantes goles y que un empate a uno no suele ser un resultado muy habitual en este tipo de partidos, me quedé con la rabia de pensar que el único gol que nos marcaron en la final fue por mi palo, cosa que no había sucedido en todo el campeonato y que, aunque enfrente tenía al, quizá, mejor lanzador del mundo, ese gol no tendría que haber entrado.
6) ¿Durante la tanda de penaltis en qué pensaba?
Recuerdo que tenía una gran confianza en nuestros dos primeros lanzadores (Daniel Fernández y Jesús Santana), dos de los mejores jugadores del mundo tirando penaltis y parándolos. Pensaba que si ellos lograban conseguir una ventaja, nosotros seríamos capaces de mantenerla. Sin embargo no pudo ser así; tras los dos primeros lanzamientos sólo había habido un gol y había sido a favor de Lituania (ni Dani ni Jesús habían conseguido marcar, aunque Jesús si había sido capaz de parar el que le lanzaron). Quizá a partir de ese momento vimos la victoria casi imposible y es posible que no afrontásemos el resto de tanda con la confianza suficiente. Era la primera vez que nos enfrentábamos a una tanda de penaltis así y seguro que si vienen más en el futuro se afrontarán de otra manera; todo sirve para aprender.
7) ¿Cómo definiría a esta selección?
Somos un equipo. Cada miembro del mismo tenemos bastante claro nuestro papel, cuerpo técnico incluido. Sabemos que ninguno es imprescindible pero que todos somos importantes. Algunos tienen un papel más destacado fuera de la pista y otros lo tienen dentro. Estamos en un momento en el que creo que todos nos sentimos a gusto con nuestro papel. El ambiente fuera y dentro de la pista es de gran complicidad, apoyo constante, trabajo en equipo.
8) ¿La organización turca ha estado a la altura de un Europeo?
La verdad es que no era la primera vez que Turquía celebraba un campeonato oficial en los últimos años. Yo estuve en el anterior (2011) y la organización fue bastante deficiente. Quizá por ello esta vez esperaba muy poco de la organización y he vuelto bastante satisfecho con lo que nos encontramos en Konya. No ha sido el mejor campeonato al que he asistido pero hemos estado bastante cómodos.
Sí que hemos echado de menos el que no haya podido ser seguido el campeonato a través de los medios de comunicación en directo debido a la falta de retrasmisión del mismo. Esperemos que en Finlandia no suceda lo mismo y podáis vivir junto a nosotros el campeonato.
9) ¿Piensa que el goalball tendrá más repercusión y seguimiento tras esta medalla?
Creo que no. Quizá dentro del mundo del deporte adaptado sí, gracias sobre todo, a la atención prestada por medios como éste, pero poco más.
Es de justicia dar las gracias a diferentes medios de comunicación que durante el campeonato han estado pendientes de nosotros. Pero sabemos que en la sociedad en la que vivimos, lo que no sale en televisión no existe y para que el deporte adaptado tenga un espacio significativo en este medio hay que esperar a las paralimpiadas; es el único evento de deporte adaptado que cuenta con un cierto seguimiento mediático. Lo que sí esperamos es que si este equipo sigue al nivel al que se encuentra actualmente, en esa cita se acuerden de nosotros y permitan a la sociedad conocer nuestro deporte mediante la retransmisión de nuestros partidos, como se hace con otros deportes (atletismo, natación, ciclismo o fútbol para ciegos). Creemos que es un deporte bastante espectacular y que podría suscitar el interés de mucha gente.
10) ¿Cómo valora esta temporada con su club y con la selección?
La temporada que finaliza la recordaré para siempre. Mi equipo, Aragón, terminó en tercer lugar en la liga regular y en la misma posición en el Campeonato de España. Además pude formar parte de la selección, consiguiendo la medalla de plata. Y como colofón tuve la suerte de jugar prácticamente todos los minutos en ambos equipos.
11) ¿Cuáles son los retos que se marcado para el próximo año?
El objetivo final no puede ser otro que conseguir una medalla en el Campeonato del Mundo del próximo verano; si no recuerdo mal, España nunca ha conseguido tal hecho pero este equipo es capaz de todo, nos lo hemos demostrado a nosotros mismos y estamos convencidos de poder hacerlo.
Sin embargo, para llegar a ese objetivo final, hay que cumplir otros anteriormente. Espero hacer un buen año junto a mi equipo en la liga y poder clasificarnos para el campeonato de España y, sobretodo, espero que me respeten las lesiones y poder trabajar duro durante todo el año. El trabajo es el único camino hacia los objetivos planteados.
12) Muchas gracias Román por su colaboración durante el campeonato y que el próximo año consiga buenos resultados.
Un saludo y muchas gracias por el interés mostrado durante el campeonato.
