- Emilio Fernández Lastra y Rafael Andarias lograron la decimoquinta y decimosexta plaza, respectivamente
SERVIMEDIA. El regatista catalán Paco Llobet ha conseguido la decimocuarta posición en el 43 Trofeo S.A.R. Princesa Sofía Mapfre de Vela, que se ha disputado en aguas mallorquinas desde el pasado lunes 2 de abril hasta este sábado. Además, han tomado parte otros cinco deportistas españoles en la clase 2.4.
El barcelonés Paco Llobet, quien se proclamó subcampeón de España el pasado año, ha finalizado con 121 puntos en las 10 pruebas celebradas. Llobet registró el mejor resultado en la última prueba, en la que concluyó en novena posición.
A pesar de que, durante esta última temporada, el regatista del RFEV-Iberdrola no ha participado en todas las regatas programadas por el Equipo Preparalímpico Español, se ha colocado como el mejor español en esta edición del Trofeo Princesa Sofía.
Por detrás de Llobet, en la decimoquinta plaza, finalizó el cántabro Emilio Fernández Lastra, con 124 puntos. Fernández Lastra, quien compitió en los Juegos Paralímpicos de Sidney 2000 y de Atenas 2004, aunque no pudo hacerse con ninguna medalla, consiguió sus mejores resultados tanto en la tercera como en la última prueba, en las que se situó en décima posición.
La decimosexta posición fue para el joven alicantino Rafael Andarias, uno de los valores con más proyección del deporte paralímpico español, quien terminó con 125 puntos. El regatista del CN Jávea, que en mayo del pasado año se coronó como campeón de España en la clase 2.4, se hizo con su mejor registro en la cuarta prueba, en la que logró una meritoria séptima plaza.
Algo más alejados en la clasificación general final se situaron Manuel Sánchez, decimonoveno con 161 puntos; José Pedro García, vigesimotercero con 192; y Rafael Llinares, vigesimocuarto con 203.
En el Trofeo Princesa Sofía Mapfre, además, han competido deportistas sin discapacidad en las clases Dragon, Match Race, RS:X, Laser Standard, Finn, 470, Star, 49er y Laser Radial.
La clase 2,4 MR, en la que compiten deportistas paralímpicos con discapacidad física, se creó en Estocolmo en 1983. Es un monoplaza de 4.2 metros y 260 kilos en el que el patrón se sienta en el barco mirando hacia adelante con todos los controles al alcance de la mano. No es físicamente exigente y, debido a que el peso de la tripulación está siempre cerca del centro de gravedad, el 2.4MR es insensible a las diferencias de tamaño del tripulante. El 2.4MR fue seleccionado como clase para participar en los Juegos Paralímpicos desde Sidney 2000.
