El ex piloto de CART y F1, con las piernas amputadas tras un accidente, afronta el Triatlón de Hawai a los 48 años
mundodeportivo.com – Alessandro Zanardi ya ha encontrado un nuevo reto: el triatlón. Quizás no sería noticia si no fuera porque el 15 de septiembre de 2011 sufrió un grave accidente en una carrera de la CART en Lautsizring, a resultas del cual le fuern amputadas ambas piernas a la altura de las rodillas.
La dura recuperación, psicológica y física, el tener que volver a aprender a caminar gracias a sendas prótesis, no mermó su espíritu competivo. Ha vuelto a correr en automóvil, incluso volvió a sentarse a los mandos de un monoplaza de F-Indy similar al que pilotaba en el momento de su accidente, debidamente adaptado.
Y aceptó más tarde el reto de ser deportista paralímpico con un resultado espectacular: dos medallas de oro y otra de plata en hand bike en los Juegos Paralímpicos de Londres 2012 y dos medallas de oro en los Mundiales de hand bike de 2013. Este mismo año ha vuelto al automovilismo compitiendo en GT para BMW, la marca que le apoyó cuando en 2003 decidió volver a competir; con la firma germana ha disputado el Mundial de Turismos nueve temporadas.
Empezar por lo más duro
Zanardi comenzará su aventura en el triatlón más duro, el Ironman de Hawai: 3,86 kms. a nado en aguas abiertas, una prueba ciclista de 180,2 kms., y un maratón de 42,195 km todo de tacada. «Nadaré gracias a un chaleco especial de neopreno que me ayudará a flotar. Utilizaré mi hand bike y para el maratón una silla de ruedas olímpica», explica Zanardi.
«Me gustan los desafíos y este triatlón es posiblemente uno de los más grandes del mundo. Afrontarlo formaba parte de mis sueños. No tengo experiencia en este tipo de pruebas, pero disputar esta prueba es motivante», añade Zanardi.
Su mayor dificultad, la maratón «porque la hand bike y la silla olímpica son muy diferentes pese al aparente parecido y yo siempre he competido en hand bike y los músculos que más trabajan son otros».
